El hombre era marinero de la embarcación Señora de los Àngeles y
fue precisamente su patrón quien encontró el cuerpo a escasos
metros del citado llaüt. Según ha podido saber este periódico,
Andrés Díaz acostumbraba a dormir en múltiples ocasiones en la
embarcación y todo apunta a que la noche en que desapareció también
se disponía a hacerlo. Sin embargo, algo le sucedió al intentar
acceder a la embarcación ya que fue a parar al agua donde fue
hallado muerto. En el mismo puerto de la Colònia se apuntó la
posibilidad de que al intentar subir al barco se resbalara y se
diera un golpe en la cabeza, sin embargo el cuerpo no presentaba
ningún hematoma. Hoy se le practicará la autopsia que esclarecerá
las causas de la muerte.
Al lugar de los hechos se desplazó la Guardia Civil de Campos,
la Policía Local de ses Salines, la Policía Judicial de Manacor que
lleva el caso y efectivos de los Geas de la Guardia Civil que
llevaron a cabo las tareas de rescate del cuerpo. Un médico
certificó la muerte de Andrés Díaz y el juez de paz de ses Salines
ordenó el levantamiento del cadáver por delegación del juzgado de
Manacor.
El muelle de puerto de la Colònia de Sant Jordi fue un continuo
ir y venir de gente y curiosos que se acercaban para conocer lo que
había sucedido. Allí mismo se vivieron momentos de mucha tensión y
nerviosismo cuando la madre y la hija y otros familiares del
marinero fallecido acudieron al lugar y tuvieron que realizar el
reconocimiento del cadáver de Andrés Díaz.
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