El incendio en el pabellón de larga estancia se declaró de madrugada y ocasionó graves daños.

TW
0

Origen: accidental. Tras una investigación de varios días la Policía Científica ha descartado la presencia de líquidos acelerantes en el incendio del Psiquiátrico y ha concluido que el fuego tuvo un inicio fortuito, casi con toda seguridad a causa de una colilla mal apagada sobre una butaca.

Según confirmaron ayer en fuentes del juzgado que investiga el caso, el informe policial ya está acabado y se ha remitido al juez. Los agentes de la Jefatura de Palma se pasaron dos días recogiendo muestras en la sala que ardió, en el pabellón de larga estancia del Hospital Psiquiátrico. Ya en un principio se especuló con dos hipótesis: un cortocircuito en el televisor (que quedó reducido a plásticos fundidos) y un cigarrillo que cayó sobre una de las butacas. Los bomberos y la Policía Local también confeccionaron sendos informes sobre lo ocurrido, pero las conclusiones definitivas quedaron en manos de la Policía Científica, que tomó muestras de la habitación siniestrada y las analizó de forma exhaustiva.

Los especialistas, con los resultados, han podido descartar que se hubiera utilizado algún tipo de líquido acelerante (normalmente combustible) en el siniestro. Los otros elementos examinados han permitido confirmar que el origen de las llamas fue accidental. El paso más complicado ha sido llegar hasta la causa del fuego, y aunque los resultados no son seguros al cien por cien, si que todo indica a que una colilla mal apagada hizo arder la butaca. De ahí, el incendio se propagó a toda la sala, destruyendo el mobiliario, la televisión y haciendo reventar los cristales de las ventanas. Las temperaturas que se alcanzaron fueron tan elevadas que se desconchó la pintura de las paredes y la sala tuvo que ser apuntalada.

Desde los sindicatos se criticó duramente los sistemas contra incendios y se denunció que, entre otras cosas, la alarma no había saltado y que las puertas especiales no se habían bloqueado. César Azpeleta, el director del complejo hospitalario, ofreció una versión diametralmente opuesta y sostuvo que todo había funcionado correctamente. Unos y otros, en cambio, sí coincidieron en alabar la actuación del personal de guardia esa noche.