La policía inició ayer una investigación para aclarar las causas de
la muerte de un vecino de es Coll d'en Rabassa, cuya identidad es
Benito Vaquer, de 75 años de edad. El cuerpo sin vida del hombre
fue hallado en el interior de su domicilio, una planta baja ubicada
en la calle Salado, alrededor de las diez y media de la mañana por
el vecino de al lado, que se llama Benildo González.
Este hombre explicó que hace unos días que no veía ni oía a su
vecino, por lo que decidió ir a su casa a ver si se encontraba
bien. La persiana de la calle estaba abierta y la vidriera también.
«Estaba la bombona de butano detrás, me costó un poco abrir.
Después abrí su habitación y lo encontré en el suelo, desnudo de
cintura para abajo», explicó Benildo. «No hice nada y avisé a la
policía», agregó. En breve se personaron varios agentes en el
domicilio.
Por el suelo de la vivienda había bastante sangre y pequeños
restos del cuerpo del fallecido. Este hecho hizo pensar que podría
tratarse de una muerte violenta, pero todo indica que Benito Vaquer
falleció por causas naturales y una o varias ratas entraron por el
corral y mordieron después el cadáver. La muerte fue comunicada al
juzgado de guardia, cuyo titular ordenó el levantamiento del
cuerpo. Operarios de la funeraria de Palma trasladaron a primera
hora de la tarde el cuerpo al depósito de cadáveres.
Es el tercer suceso en pocos días de características similares.
El lunes fue encontrado un cadáver en un descampado del Polígon de
Llevant, sobre un colchón, que había sido desfigurado por las
ratas. Anteayer por la noche ocurrió lo mismo en la calle Uruguay.
Un hombre de 32 años falleció en un descampado y el cadáver fue
mordido por las ratas.
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