Eran las diez y media de las noche del pasado domingo cuando un
taxi fue colisionado por un todoterreno en Palmanova.
El primer vehículo procedía del aeropuerto de Son Sant Joan con
dos pasajeras, dos turistas de Newcastle que acababan de llegar a
Mallorca para pasar unos días de vacaciones en un hotel de
Palmanova.
Al circular por la autopista hacia Andratx y cuando accedió al
desvío hacia Palmanova, el taxi fue colisionado por un Land Rover
que invadió el carril contrario, por causas no determinadas.
El brutal impacto dejó con heridas graves a los tres ocupantes
del taxi, y en principio de menor importancia al conductor y único
ocupante del todoterreno, un ciudadano inglés de 43 años de edad
residente en el termino municipal de Calviá.
Al lugar se desplazaron de inmediato varias unidades de la
Policía Local de Calvià, que llevaron a cabo las primeras
gestiones, y después llegaron agentes de la Guardia Civil y de la
Agrupación de Tráfico, que se encargaron del atestado del
accidente. En pocos minutos se desplazaron también varias
ambulancias del 061, entre ellas una UVI móvil.
Los médicos atendieron de urgencias a las dos turistas y al
taxista, vecino de Palma, y después los tres fueron trasladados a
dos clínicas de Palma, a la Juaneda y a la Miramar. Mientras, la
Guardia Civil procedió a la detención formal del conductor del
todoterreno, después de someterle a la prueba de la alcoholemia y
dar positivo.
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