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Antonio J.J., un vecino de Lloret de Vistalegre de 57 años de edad, falleció ayer a consecuencia de un accidente de caza. Antonio había salido ese día a cazar por la zona del Camí vell d'Algaida, en el término municipal de Montuïri. El cazador iba solo, armado con una escopeta del calibre 12. Según las investigaciones que está llevando a cabo la Guardia Civil, el accidente se pudo producir cuando el hombre bajaba por una ladera y se resbaló al encontrar una zona con mucho barro, con la mala fortuna de que la escopeta se le disparó en el pecho, falleciendo prácticamente al instante.

Algún tiempo después, un paseante encontró el cuerpo y avisó inmediatamente a la Guardia Civil. La Benemérita desplazó varias patrullas desde Felanitx y un equipo de la Policía Judicial que comenzó a investigar las causas del fallecimiento, ya que en principio se apuntó incluso la hipótesis de un suicidio, aunque posteriormente fue descartada.

Hasta el lugar también se trasladó la comisión judicial del juzgado de guardia de Manacor y un forense, que en próximos días realizará una autopsia. Se espera que así se pueda arrojar más luz sobre las circunstancias en que se produjo la muerte del cazador.