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El huracán 'Wilma', que se estacionó ayer sobre las paradisíacas playas del Caribe mexicano con intensos vientos y lluvias, ha dejado graves daños a la infraestructura y al menos tres muertos. «Afortunadamente no tenemos informes más que de dos muertos, dos en Playa del carmen y otro en Yucatán. En Playa del Carmen explotó un tanque de gas en una casa y hubo siete heridos y dos de ellos murieron», dijo el gobernador de Quintana Roo, Félix González. En YUcatán una mujer murió tras ser golpeada por un poste que se desplomó. También se han reportado cortes de energía eléctrica y agua, árboles caídos y voladuras de techos, tanques de agua y antenas de televisión, además de daños en caminos e inundaciones a causa del huracán, que bajó a categoría dos pero continuaba ayer con fuertes vientos de 185 kilómetros por hora y lluvias torrenciales que mantenían a miles de turistas atrapados en refugios. El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, en un informe a las 11 horas a.m. EDT (14.00 GMT), dijo que se esperaBA que 'Wilma' continuara desplazándose lentamente por el norte de la península de Yucatán provocando lluvias torrenciales todo el día «y luego salga (...) hacia el Golfo de México ayer noche o primeras horas de hoy, ya más débil, rumbo a Florida. El gobernador dijo que la explosión fue provocada por el fuerte viento, que empujó un tanque de gas mal instalado. El jefe del departamento de Atención de Emergencia Geológica e Hidrometeorológica nacional, Luis Eduardo Perezortiz, dijo que un primer informe preliminar efectuado durante el paso del ojo del huracán por la zona costera, revela «daños importantes». Aparte de las inundaciones, caída de postes eléctricos y cortes de servicios básicos, dijo que existen daños importantes en el sector comercial, donde algunos edificios presentan«daños estructurales». Además, la zona hotelera de Cancún se transformó en un lago, luego de que por las inundaciones la laguna que está a su espalda se conectara con el mar de enfrente. En Playa del Carmen la entrada de una tienda de electrodomésticos estaba completamente destrozada, igual que su interior. También colapsaron cinco casas precarias en ese balneario, las ventanas del edificio del ayuntamiento estaban rotas y los muebles caídos en las oficinas. Cinco prisioneros escaparon de una cárcel cercana hacia la selva, tras la caída de una valla. «Estamos atravesando una situación muy difícil. Nunca en la historia habíamos visto algo como esto», dijo el gobernador. A pesar de la destrucción, destacó que los más de 35.000 turistas que permanecían atrapados en las playas de Quintana Roo están a salvo.