El acusado, junto a dos agentes del Cuerpo Nacional de Policía, ayer, en la Audiencia de Palma. Foto: GUILLEM PICÓ

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La fiscal solicitó ayer una condena de 135 años de cárcel para un hombre de mediana edad acusado de agredir sexualmente a su mujer e hijo en Menorca. El abogado defensor pidió la libre absolución para el procesado, quien se encuentra en prisión, o que se le imponga una condena de cuatro años de cárcel por un delito de abuso sexual continuado. El juicio se celebró ayer en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma.

El acusado negó haber abusado de su mujer ni haberla maltratado a ella y a sus hijos. Manifestó que incluso después de haber terminado la relación, «y cuando ella ya estaba con su nueva pareja, venía a mi casa y llegamos a tener relaciones sexuales». El procesado admitió que en una ocasión «le rompí la nariz a mi mujer, pero no la amenacé ni la penetré y no es normal que si tenía tanto miedo de mí viniera a mi casa cuando ya habíamos terminado la relación». Asimismo manifestó ante el tribunal que como era marinero, «no podía atender como un padre a los niños», pero aseguró que su madre «no se preocupaba de ellos como tocaba, salía muchas noches y una vez le encontré una papelina de cocaína».

Según la fiscal, el acusado cometió los delitos sexuales entre los años 2000 y 2003. En total le imputa nueve agresiones sexuales contra un hijo y tres violaciones a su mujer, además de tres faltas de maltrato familiar.

La fiscal considera los hechos muy graves y solicita las máximas penas para el acusado, es decir, 10 años de cárcel por cada una de las nueve agresiones sexuales y 15 años por cada una de las violaciones contra su mujer, que suman 135 años de prisión. Por las faltas de maltrato familiar solicita una multa.