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El incendio de una casa de tres plantas en Torrecilla de Alcañiz, un pequeño pueblo de la provincia de Teruel, se saldó ayer por la mañana con el resultado de tres fallecidos y siete heridos, todos de la misma familia, de nacionalidad ecuatoriana. Los cadáveres corresponden a tres bebés menores de un año, dos de los que cuales eran gemelos.

El incendio, de causas imprecisas, obligó a desplazar hacia el lugar de los hechos a servicios sanitarios, Bomberos y Guardia Civil, aunque un vecino estuvo entre los primeros que auxilio a las víctimas, salvando la vida a varios de los heridos con la ayuda de un tractor. Los tres pequeños fallecidos fueron rescatados por los bomberos ya inconscientes a causa de la inhalación de humo, sin que las tareas de reanimación realizadas surtieran efecto. A la muerte de estos tres bebés, se suma la existencia de otros siete heridos de la misma familia. Sin embargo, no todos se encontraban en el mismo estado. Un niño de 4 años y una niña de 13 fueron hospitalizados en estado grave, el primero por inhalación de humo y su hermana con quemaduras en el 15% del cuerpo. La madre de los niños, de 45 años, una tía y la abuela, de 50 y 62, años, un niño de 5 años y una niña, de 8, resultaron heridos leves. La madre y la niña quedaron ingresadas en observación, mientras que la tía y la abuela fueron dadas de alta.

Por otro lado, una niña de 3 años y su abuela de 43 años murieron intoxicadas por inhalación de humo en el incendio de un bloque de viviendas de tres plantas en Guadalajara, donde residían en el piso superior.