Once alumnos de tercero de ESO del instituto de s'Arenal han sido expulsados tres días. Los motivos que aducen por escrito los responsables del centro giran en torno a un altercado ocurrido en un aula, cuando una alumna se sentó encima de un alumno. Pero en realidad el conflicto es anterior y las expulsiones afectan a ocho alumnos de la citada aula y a tres de otra.
Las amonestaciones han derivado en, de momento, dos denuncias ante la Guardia Civil y ayer, a primera hora de la mañana, cuatro padres de alumnos afectados se personaron en el centro para hablar con el director. Según explican estas personas «cuando estábamos en la entrada una vigilante nos prohibió el paso, nos dijo que el director no estaba y unos cinco minutos después llegaron dos patrullas de la Policía Local de Llucmajor y una de la Guardia Civil. Les explicamos a los agentes el motivo de nuestra presencia en el lugar, y poco después nos desplazamos al cuartel de la Guardia Civil para interponer las denuncias». Por parte de Ultima Horase intentó en dos ocasiones recoger la versión del director del centro, sin que en ninguna fuera posible.
La versión de dos de los padres es que el pasado día doce el director y la tutora citaron a sus hijos por separado en el despacho del primero. Allí les interrogaron sobre unas fotos que hicieron con un teléfono móvil unos días antes, cuando la alumna se sentó encima de otro alumno, en unos momentos en los que el profesor se había ausentado por espacio de unos quince minutos. Añaden que sus hijos estuvieron unas dos horas y media, que registraron el móvil sin encontrar la foto buscada, pero sí visionaron otras que había, y aseguran que los menores fueron objeto de insultos, además de hacerles dibujar en un folio la imagen que supuestamente fotografiaron. Los motivos para amonestar a estos dos alumnos son porque está prohibido utilizarlo en el centro, y en la causa de la amonestación se especifica que «las fotos se tomaron cuando circulaba el rumor de que la alumna y los alumnos 'se tocaban'». El resto de alumnos amonestado habría proferidos frases ofensivas contra la pareja, tanto en los momentos en los que se ausentó el profesor, como después en horas de recreo. También, ha circulado el rumor de que la pareja fue «amenazada» con que las fotos que se habrían tomado se colocarían en una página de internet.
Los padres dicen que entienden la amonestación por utilizar un teléfono móvil en el centro «pero no las formas del director y de la tutora puesto que, además del trato a nuestros hijos, en ningún momento han hablado con nosotros para infomarnos del problema surgido y tampoco nos entregaron el escrito de las expulsiones».
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