La operación de compraventa de Son Bunyola por parte de Richard Branson es investigada por la policía.

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PATRICIO CANDIA/MIQUEL JUNCOSA
Ella y su esposo están en el punto de mira de la policía tras adquirir la finca Son Bunyola al magnate inglés Richard Branson por unos 12 ó 13 millones de euros, en una operación en la que habrían participado sociedades opacas con la intención de «lavar» dinero negro. El administrador único de Son Bunyola SL es el abogado Alejandro Feliu Vidal, del bufete Feliu, que ha sido objeto de dos registros tras la 'operación Relámpago'.

La policía acudió hace dos semanas atrás a una finca situada en la Serra de Tramuntana, domicilio de los Hoare, pero no les halló. Christian Hoare no ha dado señales de vida, pese a que ha sido citado, y su esposa, Marta Mónica, colombiana con pasaporte británico, tiene una orden de detención desde entonces, ya que a su nombre figura todo el patrimonio familiar.

El abogado que les representa, Fernando Mateas, explicó ayer que presentará ante el juez «toda la documentación necesaria» para demostrar que la licitud de la compraventa de Son Bunyola. El Juzgado Número 7 de Palma dictaminó a su vez, a raíz de la investigación llevada a cabo por la Agencia Tributaria, el bloqueo de cuentas bancarias en Balears a nombre de Marta Mónica Hoare por valor de más de 30 millones de euros.