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La Policía Judicial de la Guardia Civil de Inca está investigando el caso de una menor venezolana de 16 años que denunció que había sido secuestrada y violada durante cuatro días en un piso de la calle Escorca, en Inca. El principal sospechoso, un senegalés de 31 años, ha sido arrestado después de que los investigadores le tendieran una trampa cuando había quedado en la estación del tren con la madre de la adolescente.

La víctima, que reside con su familia en Santa Margalida, se había fugado al parecer de casa y su madre, hace unos días, interpuso una denuncia por su desaparición en la jefatura del Cuerpo Nacional de Policía, en Palma.

El miércoles por la tarde la adolescente se puso en contacto con su madre y le contó los detalles de su cautiverio.

La mujer se puso en contacto telefónico con la Policía Local de Inca y esbozó lo ocurrido. Al rato se presentó en aquel cuartel y cuando relataba la odisea de su hija Moustapha B., el presunto secuestrador, la llamó por teléfono al móvil para amenazarla. Supuestamente quería evitar que la madre acudiera a la comisaría, pero ya era tarde.