Sanitarios y bomberos evacuan a Oliver Ulmann, minutos después de producirse su caída. El hombre murió por la noche en el hospital. Foto: A.SEPÚLVEDA

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JAVIER JIMÉNEZ-GUILLEM PICÓ

La muerte de Oliver Ulmann, el obrero que estaba en estado crítico tras un accidente laboral en Banyalbufar, ha destapado graves deficiencias en materia de seguridad en la obra. La Guardia Civil ha concluido que la víctima no llevaba casco, ni arnés y que estaba encaramado a un andamio sin homologar. La Policía Judicial y la Conselleria de Treball investigan el caso.

El obrero alemán, que cumplía 35 años este lunes, cayó desde seis metros de altura y sufrió una contusión craneal crítica. Llegó en coma a Son Dureta, tras ser evacuado en helicóptero, y los médicos lo intervinieron de urgencia, pero su estado no mejoró. Minutos después de la medianoche falleció.

Durante el martes y ayer la Guardia Civil de Esporles investigó el accidente laboral y tomó declaración al compañero de obra del fallecido, que declaró que Ulmann se había mareado tras agacharse en el andamio para recoger material. El joven alemán presentaba una cicatriz en el pecho y parece ser que había sido operado de alguna dolencia cardíaca.

Los agentes tienen previsto entrevistarse con la propietaria alemana de la finca, que encargó la obra en el tejado de su casa. De la inspección ocular realizada en el lugar del accidente se desprende que Oliver no portaba casco ni arnés, lo que quizás le habría salvado la vida, y que los tres maderos que estaban colocados a modo de andamios no estaban homologados.

Los funcionarios realizaron un reportaje fotográfico y toda la documentación será remitida al juzgado que investiga la muerte laboral.

Durante la jornada de ayer se registraron otros dos accidentes laborales en Mallorca, con el resultado de dos trabajadores heridos. El primer siniestro tuvo lugar poco después de las nueve de la mañana, en una finca ubicada en el kilómetro 2 de la carretera de Santa Maria a Santa Eugènia. Un hombre de unos 50 años cayó de la caja de un camión, desde 1,20 metros de altura, y se fracturó un brazo. Otros trabajadores llamaron al teléfono de emergencias 112 y se movilizó al 061, Policía Local de Santa Maria y a la Guardia Civil. Los agentes de este último Cuerpo se encargaron de la investigación. La ambulancia evacuó al herido a una clínica de Palma. Fuentes sanitarias indicaron que su estado no era grave. Horas después se registró otro accidente laboral en un hotel de Llucalcari. Un varón de unos 60 años cayó de un andamio y sufrió diversas lesiones. Efectivos del 061, de la Policía Local y de la Guardia Civil también se personaron en el establecimiento. El trabajador estaba consciente y fue atendido por los sanitarios de la ambulancia. Posteriormente fue conducido a otra clínica de Palma, donde se le efectuó un reconocimiento médico para determinar el alcance de las lesiones. La Guardia Civil también realizó diversas gestiones para aclarar lo ocurrido.