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JULIO BASTIDA Los pescadores de Balears no ganan para disgustos. Además de ser unos de los grandes afectados del elevado precio de los carburantes, en la tarde de ayer tuvieron que socorrer con urgencia a un barco pesquero, de unos veinte metros de eslora, ante el inminente peligro de hundimiento.

A las 16 horas saltaban todas las alarmas del puerto de Palma.
Al parecer y, según las primeras hipótesis de la investigación, un barco pesquero que se encontraba amarrado en el muelle palmesano sufrió una avería en el casco y se abrió una vía de agua que rápidamente provocó que agua del mar entrase en el interior de la embarcación.

La intervención de los pescadores que se encontraban próximos al barco y la presencia de Bombers de Palma, Policía Local, Salvamento Marítimo y Policía del Puerto evitó el hundimiento del pesquero.

Nada más llegar los servicios de emergencia activaron el protocolo de actuación previsto en estas situaciones, y con ayuda de varias bombas extractoras consiguieron evacuar gran parte del agua que había accedido al interior del habitáculo.