Fabián Harapu, el rumano experto en desvalijar hoteles reventando cajas fuertes, que fue detenido el pasado jueves en Calvià, ha ingresado en prisión hasta que se celebre su procesamiento.
Harapu ya había sido detenido y condenado en Palma en el año 2004 por haber forzado también, hasta 32 cajas fuertes. El castigo consistió en una 'invitación' a abandonar el país, pero por un error administrativo, la orden de expulsión no se completó con la prohibición de entrada, por lo que el delincuente rumano volvió a la Isla a reincidir en el saqueo de hoteles.
En su segundo periplo de delincuencia, Harapu está acusado de reventar 35 cajas fuertes más.
Junto al rumano, la Guardia Civil también detuvo a su pareja sentimental y a un joven, presuntos cómplices de los robos. Ambos quedaron en libertad con cargos.
Según fuentes próximas a la investigación, en el piso donde Harapu y sus compinches escondían el material robado, los agentes encontraron televisores de plasma, cámaras fotográficas, documentación personal, ropa de marca, ordenadores, teléfonos móviles y joyas, valorado todo ello en más de 150.000 euros.
Tras la segunda detención, lo que ha vuelto ha quedar constatado es la destreza de Harapu en la comisión de sus ilícitos menesteres.
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