Procesan a dos reclusos de la cárcel de Palma por vender droga desde su celda

Los dos presidiarios fueron excarcelados para poder a acudir a su enjuiciamiento que se celebró en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma. Ambos estuvieron custodiados en todo momento por varios agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP).

Los hechos que se imputan a los procesados son los ocurridos el día 5 del mes de julio del año 2006, cuando los presos compartían una celda del módulo 11 del Centro Penitenciario de Palma.

En dicha celda, funcionarios de la prisión procedieron a realizar un cacheo y se encontraron a los dos reclusos sentados en una mesa y presuntamente manipulando varias sustancias, que resultaron ser hachís y heroína en poca cantidad. En su declaración ante el tribunal, los dos acusados coincidieron en manifestar: «La droga era para nuestro consumo propio».

En cambio, según el informe de los funcionarios que irrumpieron en la celda, la droga se encontraba individualizada y envuelta en papel con referencias a 'el Mimi', 'el Toni' y 'el Colombiano', todos ellos también internos del módulo de la prisión. Según el fiscal, los dos procesados se dedicaban a la distribución de la droga dentro del centro.

Respecto de las etiquetas que había en la mesa, los dos acusados también coincidieron en manifestar que en la cárcel «jugábamos mucho al parchís, y apostábamos refrescos y tabaco que después cobrábamos en el economato». «Las etiquetas eran los nombres de los deudores que habían perdido en el parchís», agregaron.

Para declarar en el juicio, también fueron excarcelados los reclusos cuyas identidades podían coincidir con las etiquetas encontradas por los vigilantes. Éstos también corroboraron la versión de las deudas del parchís.

Inicialmente, el Ministerio Fiscal solicitaba penas de once años de cárcel para cada uno de los procesados, pero tras la celebración del juicio, donde ambos se confesaron «drogadictos», la petición de condena se les fue rebajada a nueve años. Los abogados defensores solicitaron la absolución de sus defendidos.

Ahora es turno del tribunal que ha presidido la sala durante el juicio, decidir si José Manuel H., y Miguel Àngel G., son culpables de traficar desde la penitenciaría de Palma.