TW
0

El avión de Spanair siniestrado ayer en Barajas, un MD-82 con matrícula EC-HFP, fue adquirido, en régimen de alquiler, por la compañía con sede en Palma el 23 de julio de 1998 a la empresa de «leasing» GECAS (GE Capital Aviation Services Ltd.), tras haber operado para la compañía Korean Air Lines entre 1993-1999.

Había contabilizado unas 32.000 horas de vuelo y tuvo a principios de año la revisión mayor y otra, según la compañía, el pasado mes de mayo, pero de menor calibre. Desde Spanair apuntan que este avión llegó a Barajas procedente de Barcelona ayer por la mañana, en concreto a las 10.13 horas con el número de vuelo JK 455. Nada hacía presagiar que horas más tarde se producirá el fatal incidente.

Las mismas fuentes de la aerolínea indicaron que momentos antes del trágico suceso de ayer, «el comandante reportó una avería de un indicador de la temperatura exterior del aparato. Esta avería se reparó conforme a los procedimientos habituales por técnicos de Spanair, procediéndose a continuación a realizar la operación de despegue». Instantes después, una vez autorizada la operación de despegue en Barajas, el avión se desplomaba en la cabecera de la pista. Spanair cuenta con 21 aviones MD-82/83, todos ellos iban a ser retirados de la flota de la compañía en varias fases, la primera de ellas el próximo 14 de septiembre, en el que 10 MD-82 dejarían de operar, con el fin de reducir costes y cumplir, de este modo, el plan de viabilidad aprobado por SAS, propietario de Spanair. Los MD-82 son la flota más antigua de Spanair, que se compone de 5 Airbus A-321, 18 Airbus A-320, 11 MD-87 y 5 B-717, así como los 5 B-717 de AeBal.