J.P.O., el otorrino de Palma detenido por fotografiar desnudas a sus pacientes, sin que ellas lo supieran, tenía en una cámara digital treinta imágenes de mujeres, en la camilla de su consulta.
El SAF (Servicio de Atención a la Familia) del Cuerpo Nacional de Policía está analizando el ordenador personal del médico, ya que se teme que tenga fotografías de otras muchas pacientes. De hecho, parece que para él era una práctica frecuente sacar instantáneas de menores y mujeres y acudían a su consulta. Muchas de las fotos están tomadas de espaldas y en casi todas las víctimas van escasas de ropa. Ninguna de ellas sabía que las grababa con una cámara oculta.
El sábado J.P.O. fue trasladado a los juzgados de Vía Alemania y el magistrado, tras escuchar su confesión, decretó su ingreso en prisión, eludible con el pago de una fianza de 30.000 euros. Ayer, los allegados del doctor estaban realizando gestiones para reunir el dinero y sacarlo de la penitenciaría.
Los investigadores creen que además de las pacientes que aparecen en la cámara digital oculta en su despacho hay otras muchas mujeres que fueron grabadas sin su consentimiento cuando visitaban al otorrino.
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