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El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, que ayer se encontraba en funciones de guardia, ordenó el ingreso en prisión de un conductor acusado de intentar arrollar a un grupo de personas en Cala Major y causar lesiones a dos de ellas. Tanto el conductor como los dos heridos son de nacionalidad nigeriana. Uno de los atropellados sufrió lesiones leves, mientras que el otro fue hospitalizado en Son Dureta con una pierna rota.

Los hechos ocurrieron sobre las cinco de la madrugada del sábado al domingo frente a una discoteca de la Avenida Joan Miró, ya en la zona de Cala Major. En un primer momento, la Policía Local se desplazó al lugar, ya que se había informado del atropello de una persona. Cuando llegaron los agentes, se encontraron a un varón de 33 años en el suelo con la pierna rota, y a otro, de la misma edad, con hematomas en las extremidades. Estas dos personas indicaron que habían sido atropelladas por un conductor que había intentado arrollar a varias personas más y se había dado a la fuga.

Investigación
La Policía Local puso los hechos en conocimiento del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), y los efectivos del Grupo de Homicidios iniciaron una investigación. Los agentes tomaron declaración a los dos heridos y a otras personas que pudieron esquivar el vehículo.

Se da la circunstancia de que el varón que ingresó con la pierna rota es amigo del conductor que lo atropelló, cuya identidad es Lucky O. El herido explicó que el domingo salió de la discoteca y vio cómo Lucky estaba discutiendo con una quincena de personas. Él se acercó hasta el barullo y logró poner orden, después de tranquilizar a Lucky, quien, al parecer, se encontraba bajo los efectos del alcohol. Éste se marchó caminando, pero al cabo de poco tiempo regresó con su coche, marca Hyundai, se subió a la acera e intentó atropellar al grupo de personas con las que había discutido, también de nacionalidad nigeriana.

La mayoría de ellas se dio cuenta de que venía el coche y se apartaron, pero su amigo, que después de mediar en la pelea se había quedado allí, paradójicamente fue el que salió peor parado y fue golpeado lateralmente por el coche.

Los agentes identificaron a Lucky y acudieron a su domicilio. Al no encontrarlo le dejaron una citación. Lucky se presentó el lunes en la Jefatura de Policía y quedó detenido, acusado de los delitos de lesiones y contra la seguridad del tráfico. Los agentes examinaron su vehículo, que tenía la luna de la puerta del acompañante rota y golpes en la parte delantera producidos por el atropello.

Ayer por la mañana el detenido fue puesto a disposición judicial y el juez decretó su ingreso en prisión. Lucky, quien se encuentra en situación legal en España y carece de antecedentes, abandonó los juzgados llorando cuando era conducido a la cárcel.