La Guardia Civil del Seprona del destacamento de Pollença abrió hace unos días un expediente a los propietarios de tres caballos que vivían en situación infame en unas cuadras de Inca.
A partir de ese momento los agentes realizaron una exhaustiva investigación y centraron sus esfuerzos en la inspección ocular, interrogatorios y recopilación de documentación. Una vez que finalicen las mismas serán traspasadas las diligencias a la Conselleria, quien aplicará las correspondientes sanciones.
Las primeras voces de alarma saltaron hace unos meses cuando otros usuarios del recinto se dieron cuenta de que había un caballo que su propietaria no acudía periódicamente a darle de comer, sacarlo de la cuadra y proceder a la limpieza de la misma.
Fue entonces cuando 'Drac' se convirtió en el triste protagonista de la historia. Un pura raza española, de unos cuatro años de edad y de un valor que oscila entre los 6.000 y 18.000 euros, presentaba síntomas evidentes de desnutrición y 'stress', llegando en alguna ocasión a comerse a bocados los tablones de la cuadra.
Su propietaria, una vecina de la localidad, argumentaba que «no disponía de tiempo suficiente para cuidarlo, pero que lo quería mucho y no quería cederlo, venderlo o regalarlo».
El animal consiguió sobrevivir gracias a la generosidad y humanidad de varios socios y directivos de un club hípico de la ciudad que se interesaron por el equino y que durante meses lo han alimentado, sacado a pasear y le han limpiado la cuadra.
Fuentes próximas a la investigación a las que ha tenido acceso Ultima Hora, han manifestado: «Si los animales están vivos es porque Inca tiene el mejor club hípico de Mallorca y la gente que lo dirige son de una calidad humana impresionante. Muchos socios y directivos han perdido muchas horas de su tiempo porque no hay derecho que le hagan esto a un animal».
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