La Policía Local de Capdepera corre el peligro de quedarse sin vehículos oficiales. Ayer, el mismo agente que el pasado lunes inmovilizó una motocicleta con un cepo en el párking del cuartel, llevó a cabo la misma acción con otra motocicleta oficial. El motivo que aduce el policía local en esta ocasión es que los vehículos no llevan la documentación oficial.
Como ya había ocurrido tres días antes, pasadas las dos de la tarde, una vez finalizado su turno de servicio, el agente estacionó la motocicleta que había utilizado en el párking del cuartel, al lado de la que inmovilizó el lunes. Minutos después le colocó el cepo y al parecer formuló por escrito una denuncia.
Como testigos había algunos de sus compañeros, que se quedaron «estupefactos» ante la nueva acción del agente, aunque la verdad es que para otros la sorpresa fue relativa, puesto que hay quien asegura que el policía ya había anunciado que seguirá en esta línea.
Los motivos por los que colocó el cepo el pasado lunes fueron los de no haber pasado la ITV y no disponer de los documentos originales.
En este sentido, el inspector jefe Juanjo López manifestó a este periódico que la ITV no tiene por qué pasarla hasta el 16 de octubre de 2010, y explicó que es habitual que los vehículos oficiales de la Policía Local lleven fotocopias de los documentos, además de asegurar que la flota se encuentra en perfectas condiciones técnicas.
En la actualidad el parque móvil de la Policía Local de Capdepera está formado por seis motocicletas, una grúa, seis turismos y un furgón, aparte de dos coches camuflados. De las seis motocicletas, dos están inmovilizadas con cepos, una al lado de la otra.
El policía que lleva a cabo estas acciones ha sido expedientado en anteriores ocasiones, y desde el Ajuntament se le retiró el permiso para llevar armas de fuego.
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