La policía ha detenido en San Sebastián a un chino, de 28 años, que intentó matar a hachazos a un compatriota en Palma hace un año. La agresión vino motivada por un ajuste de cuentas por matrimonios blancos, es decir, de conveniencia, y el arresto del sospechoso ha sido complicado ya que éste cambió de lugar de residencia, de aspecto físico y de identidad. No obstante, a través de las huellas dactilares se logró comprobar su verdadero nombre.
La agresión se produjo alrededor de las 21 horas del 30 de abril de 2008. La víctima caminaba con su compañera por la calle 31 de Diciembre, cuando fue abordada por cuatro individuos. Tres de ellos lo arrojaron al suelo, mientras que el cuarto le propinó varios golpes en la cabeza con un hacha, al tiempo que le gritaba: «quiero que te mueras ahora mismo y te voy a destrozar».
Los gritos de socorro de la mujer alertaron a los viandantes y cuando algunos se acercaron a la pelea, los agresores se dieron a la fuga.
La víctima fue trasladada a un hospital y sufrió un traumatismo craneoencefálico y fractura con hundimiento en el parietal derecho. Poco después se recuperó y fue dada de alta, aunque tuvo que reingresar al cabo de unos días por cuadros de vértigo y otras secuelas.
Por su parte, los agentes del Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) se hicieron cargo de la investigación. Los agentes comprobaron que la discusión vino motivada por una serie de desavenencias entre los implicados a la hora de amañar matrimonios.
El día 1 de mayo se detuvo a dos de los sospechosos, que habían arrojado a la víctima al suelo. Estos dos individuos pasaron a disposición judicial y quedaron en libertad tras declarar ante el juez de guardia.
Los agentes continuaron las gestiones para dar con el autor material de la agresión, pero chocaron en numerosas ocasiones con el hermetismo de la comunidad china.
Las pesquisas llevaron a los investigadores hasta la compañera sentimental del autor de los hachazos, aunque ésta manifestó que el joven estaba en China y que habían roto la relación.
Cuando se produjo la agresión, el sospechoso residía legalmente en España, pero no acudió a renovar su tarjeta de residencia para no ser detenido, por lo que pasó a estar en situación irregular.
Los policías no creyeron a la mujer y la siguieron vigilando. Hace unos días detectaron que había ido a vivir a San Sebastián. Los agentes del CNP de la ciudad, a petición de los de Palma, montaron un dispositivo de vigilancia y hallaron al sospechoso con ella, el pasado jueves.
El agresor, cuya identidad es Chengai L., había cambiado de aspecto físico considerablemente, con el propósito de evitar su detención, y como estaba ilegal se había hecho con documentación falsificada. No obstante, tras diversas pruebas se comprobó que se trataba de Chengai, por lo que fue detenido por intento de homicidio.
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