Momento en que el féretro es sacado del tanatorio mientras suena el himno de la Guardia Civil. Foto: A. SEPÚLVEDA

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El tanatorio de Bon Sosec fue ayer el escenario de las honras fúnebres de Francisco Callado Gutierrez, el agente del Destacamaneto de Tráfico de la Guardia Civil de Inca que el lunes murió en un accidente de tráfico.

A las once y media de la mañana estaba formada la guardia de honor con sus compañeros más cercanos. En el tanatorio estaban las autoridades. Vimos en primera línea a Francisco Javier Velázquez, director general de la Guardia Civil y el CNP; al general jefe de la Dirección Adjunta Operativa (DAO); al general jefe de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil; al delegado del Gobierno; los presidentes de la Audiencia y del TSJB; el fiscal jefe; el jefe superior del CNP; mandos de los ejércitos de Tierra y Aire; del CNP de Palma; de la Policía Local; de los Bombers de Mallorca y, por supuesto, toda la plana mayor de la Comandancia de Palma, con el coronel Basilio Sánchez Rufo al frente. El féretro llegó cubierto con la bandera de España. Fue transportado por su hermana, guardia civil del Destacamento de Tráfico de Manacor, y por amigos y familiares, dos de ellos funcionarios del CNP. Se cantó el himno nacional y antes de la misa se le entregó a título póstumo la Cruz de Plata de la Orden del Mérito de la Guardia Civil. Cuando se sacó el féretro, también a hombros de compañeros, sonó el himno de la Guardia Civil. Después se efectuó el traslado al cementerio de Son Valentí, donde antes del entierro se disparó una salva en honor del fallecido.