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«Eres la única persona que quiero y te voy a matar». Estas fueron las palabras que según la víctima pronunció un ex pareja mientras entraba en su habitación mientras blandía un cuchillo de grandes dimensiones. La agredida, un transexual que había convivido durante años con su agresor, trató de huir por el único camino que tenía. Según sostiene la acusación y manifestó ella en el juicio, salió por el balcón de la casa y trató de descolgarse hasta la calle. «Me dije que tenía que salvar el pellejo, así que salté e intenté agarrarme, pero me caí», aseguró. La transexual vivía en un primero, por lo que la caída le rompió los dos tobillos: «Él me dejó tirada como un perro cuando me caí, así que tuve que andar por lo menos treinta metros de rodillas, hasta que me encontré con un alcantarilla y me dije que por lo menos le rompería las piernas».

El acusado, un hombre de 60 años para el que la Fiscalía pide diez años de prisión, dice que ese día estaba trabajando cuando ocurrieron los hechos, a las dos de la madrugada en la calle Tomás Rullán de Palma. La pareja tiene un largo historial de denuncias retiradas y admitidas por malos tratos, aunque la víctima señaló en el juicio que: «Él es buen chaval cuando no bebe, pero borracho es peligrosísimo». Sin bien, también afirmó que aquella noche no había bebido. La Policía Nacional no encontró al acusado en la casa ni en los alrededores y tampoco encontró un cuchillo cuando fueron a auxiliar a la víctima, que se encontraba tirada en la calle.