El mayor Brull ha ordenado una exhaustiva investigación para esclarecer los hechos. | Alejandro Sepúlveda

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Los agentes de la Policía Local de Palma y, más concretamente los destinados en Son Gotleu y Pere Garau, están siendo objeto de una trama vecinal cuyo objetivo es conseguir que sancionen a los agentes más 'molestos' de la barriada.

Según información a la que ha tenido accedo Última Hora, desde hace algunos meses, en las barriadas de Son Gotleu y de Pere Garau, se están distribuyendo unas octavillas y correos electrónicos donde se explica, con pelos y señales, el procedimiento por el cual se puede expedientar a un policía.

Se trata de una trama organizada, al parecer, por algún colectivo vecinal molesto con las actuaciones policiales. La misma consiste en formular numerosas quejas personalizadas sobre los agentes que más sanciones imponen y con todos aquellos policías que cumplen con mayor esmero con sus obligaciones.

De hecho, la comisaría de Llevant, y especialmente alguno de los agentes más cumplidores, ya ha sido objeto de las iras ciudadanas. Afortunadamente, los mandos policiales, con el mayor Tomás Brull al frente, han tomado cartas en el asunto y anuncian que se perseguirán a todos aquellos ciudadanos que mientan en la presentación de sus quejas.

Investigación abierta

Nada más conocerse la noticia, desde la jefatura de la Policía Local se ha abierto una exhaustiva investigación con la finalidad de esclarecer los hechos y analizar, una por una, todas las quejas formuladas. En la octavilla interceptada y que obra en poder de la Policía Local se afirma: «Tenéis que presentar quejas, los recursos no sirven para nada. Nosotros en Son Gotleu lo estamos haciendo y ya hay cuatro policías que han dejado de multar y los dos más 'hijos de puta' (sic) están a punto de echarlos del cuerpo porque son interinos y los estamos machacando».

El texto prosigue. «Ir al cuartel y pedir hablar con un superior. Le cuentas que estás de acuerdo con las multas, pero que el trato recibido por el agente es vejatorio e insultante y que quieres presentar una queja». Al mismo tiempo el mail incita a que las quejas las pongan mallorquines y que únicamente lo hagan contra la Policía Local, dado que el Cuerpo Nacional de Policía hace caso omiso a las quejas y, «son vengativos y te inflan a registros».

De la misma manera, el escrito destaca la importancia de que las quejas sean presentadas por gente mallorquina y que entre una y otra pasen unos meses con la finalidad de no levantar sospechas.