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El condenado por los asesinatos de Sonia Carabantes y Rocío Wanninkhof, y por un intento de violación cometido en 2001 en Benalmádena, Tony Alexander King, ha solicitado, por medio de sus abogados, cumplir la pena que le quedaría en una prisión del Reino Unido.

El ciudadano británico, que residía en la Costa del Sol, fue condenado a 36 años de prisión por abusar sexualmente y asesinar a la joven de 17 años Sonia Carabantes el 14 de agosto de 2003 en Coín (Málaga). Además, fue sentenciado por el asesinato de Rocío Wanninkhof, en 1999, a 19 años de prisión.

Asimismo, le pesa una condena de siete años de cárcel por agredir y tratar de violar a una mujer en Benalmádena (Málaga) en 2001, tal y como recordó hoy 'La Opinión de Málaga'.

En este momento, se tramita la ejecutoria del británico, por lo que se están recopilando las sentencias para que se emita un auto en el que se fije la pena máxima a cumplir. La petición del británico se tramita, sin embargo, fuera de la vía judicial, ya que se ha presentado recientemente ante el Ministerio de Justicia.

Así, será el Gobierno, a través del convenio de extradición de presos existente entre el país anglosajón y España, quien deba decidir si permite que Tony Alexander King cumpla en su país lo que le queda de condena, aunque tendría que ser extraditado antes.

A Tony Alexander King le quedaría unos 23 años de condena por cumplir en la cárcel, ya que lleva seis años y poco más de nueve meses encarcelado en España, y actualmente se encuentra en el penal de Herrera de la Mancha (Ciudad Real).