El perro, un cocker, había caído a un pozo de unos cuatro metros de profundidad.

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Agentes de la Policía Local y los Bombers de Palma tuvieron que efectuar, a primera hora de la mañana de ayer, un laborioso rescate canino.

Sobre las 9.15 horas, un vecino de la zona de sa Vileta , en Palma, alertó a los equipos de emergencia que en el Valle del Silencio, paraje de montaña situado justo detrás del cementerio había un perro ladrando y atrapado en el interior de un agujero de unos tres metros de profundidad.

Rápidamente, una pareja de la Policía Local de Palma motorizada acudieron a la zona, dejaron sus vehículos y se adentraron un kilómetro campo a través hasta localizar al animal. Acto seguido, se alertó a los Bombers de Palma quienes acudieron velozmente para rescatar al animal.

A su llegada, los equipos de emergencia precintaron la zona afectada, colocaron las escaleras y con la ayuda de una red consiguieron inmovilizar al perro y extraerlo del agujero.

Afortunadamente, el animal, un hermoso cocker de color negro, no sufrió daño alguno. Al parecer y, según los bomberos, la gran acumulación de basura que había en el interior del pozo amortiguó la caída.

Acto seguido, el animal, que estaba muy asustado, fue sujetado por una cuerda y conducido hasta la explanada del cementerio de sa Vileta donde les aguardaban el personal de la perrera municipal de Son Reus para hacerse cargo de la custodia del perro rescatado.