Los búlgaros detenidos por el crimen de Son Canals guardan silencio y van a la cárcel

El juez José Castro decretó la medida de prisión ante los «vehementes indicios» de que los dos detenidos, antel Todorov Krasimeno y Yuliyan Todorov Angelov fueron coautores de la muerte del hombre. Según el auto judicial, el segundo de los dos mantenía una relación sentimental con el fallecido. Por eso, tanto él como los otros dos posibles coautores creían que la víctima guardaba en su domicilio una importante cantidad de dinero. Así, fueron a su domicilio y Manuel Sánchez les abrió la puerta y les invitó a unas cervezas. Según el auto, una vez dentro, los tres jóvenes ataron de pies y manos con cinta de embalaje a la víctima y comenzaron a torturarlo para que les dijera dónde estaba el dinero. La reiteración de los golpes provocó la muerte del hombre.

Robo

Después regitraron la casa para llevarse dinero, collares, anillos, un reloj, un rosario y un monedero. Por la mañana, según el relato del magistrado se marcharon a Bulgaria.

Los dos detenidos se acogieron a su derecho a no declarar ante el magistrado. Su huída después de los hechos es uno de los puntos en los que el magistrado justifica la decisión de ingreso en prisión, dado que de ella se deduce un riesgo de fuga elevado. Además valora los múltiples indicios en su contra, desde varios comentarios que realizaron los implicados a las llamadas encontradas en el teléfono de la víctima y a los objetos del fallecido que aparecieron en la casa de los arrestados.

El próximo miércoles se prevé que el tercero de los detenidos llegue a España desde Bulgaria. El traslado de éste se ha postergado por motivos de seguridad.