La Guardia Civil vigila las calles de Magaluf. | ultimahora.es

TW
23

Arde la noche en Magaluf. Ayer un total de cuatro turistas denunciaron que habían sido violadas en locales y calles de aquel núcleo turístico. La Guardia Civil, sin embargo, cree que dos de los casos tienen «muy poca credibilidad».

Tal y como ha adelantado esta semana Ultima Hora, la oleada de violaciones empezó en Alcúdia, donde un marroquí armado con una katana japonesa atacó a una vecina y la violó. El hombre, tras ser detenido, ingresó en prisión.

Animador

Días después, en un hotel del Port de Pollença, una turista irlandesa de 15 años de edad denunció que había sido violada por un animador senegalés del establecimiento.

El trabajador, que también ejercía de DJ, sostuvo que las relaciones fueron consentidas y los agentes descubrieron que días antes los dos protagonistas habían intercambiado SMS con sus teléfonos móviles. En la noche de ayer hasta cuatro veraneantes, la mayoría de ellas británicas, acudió a la Guardia Civil para denunciar que habían sido violadas. En uno de los casos, una joven fue atacada en un bar de Magaluf y los agentes creen que fue forzada. Otro de los ataques se produjo poco después y también parece acreditado que la extranjera fue obligada a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad.
En los dos últimos casos, sin embargo, hay serias dudas sobre la credibilidad de las denunciantes y la Benemérita creen que mantuvieron contactos sexuales de forma voluntaria, bajo los efectos del alcohol, y horas después se arrepintieron y decidieron acudir al cuartel.

Los investigadores no habían practicado ayer detenciones, pero algunos de los sospechosos eran jóvenes turistas que también se encontraban ebrios.