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Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la comisaría del aeropuerto de Son Sant Joan procedieron a la desarticulación de un peligroso grupo organizado de robos que operaba especialmente en la terminal de salidas y el párking. Los arrestados son Lazhari Z., argelino de 44 años de edad, residiendo en España desde hace años y con más de 70 detenciones; Kenan B., alemán, de 46 años y detenido en siete ocasiones anteriores y, finalmente, Salvatore E., nacido en Italia, de 41 años y con más de 80 antecedentes.


Las investigaciones comenzaron hace dos meses aproximadamente cuando se detectó el aumento de hurtos en la zona de salidas y parking, hechos que siempre tenían unos denominadores comunes, precisión, la habilidad y rapidez, el perfecto conocimiento de la actividad aeroportuaria, las costumbres de los pasajeros y la selección de las víctimas.


El 'modus operandi', según la policía, consiste en actuar el grupo, cada uno de ellos tiene un rol. Uno de ellos selecciona la víctima, generalmente un turista de cierta edad, o del que se desprende, por distintos conceptos, que puede ser un viajero adinerado, contacta con éste cuando está esperando un medio de transporte o termina de recoger un vehículo de alquiler, lo habitual es que nada más sentarse en el coche deje su bolso o maletín pequeño en el que se transportan los efectos de valor, documentos importantes, cartera y dinero.


El contacto consiste en requerir imperiosamente al turista por una dirección, un lugar o algo similar, la petición se hace tan insistente que finalmente esa persona se baja del coche para explicar que no entiende nada, que no es de aquí o por donde se sale del aeropuerto, ese es el momento en el que otro de los componentes, abriendo la puerta contraria o trasera del vehículo del viajero se apoderan del género.


Con la puesta en libertad de uno de sus miembros tras unos días de estancia en prisión su actividad se incrementó, derivando esos hurtos en robos con violencia cuando alguna víctima se resistía o se percataba de la sustracción.


Los delincuentes fueron identificados comprobándose que no eran actuaciones aisladas, que conformaban un grupo dedicado exclusivamente a la actividad delictiva.