Driss Oulad, afirma que vive aterrado ante la posibilidad de que le peguen un tiro. | Alejandro Sepúlveda
Palma de Mallorca08/12/11 0:00
«No hay derecho. Hace seis meses que estoy de baja por la paliza que me propinó un hombre a la salida de una gasolinera. Poco después, me entero de que la persona que me agredió cogió una pistola y se lió a tiros contra un coche apartado en el Polígon de Llevant de Palma. La policía dictó una orden de búsqueda y captura y, a las pocas horas de detenerlo, ya estaba de nuevo por la calle. ¿Esta es la Justicia española?¿Hay derecho?», afirma Driss Oulad, un marroquí de 37 años de edad, que el pasado mes de junio fue brutalmente agredido por el protagonista de esta historia.