La Guardia Civil recoge los restos del cadáver en el islote de na Galera, ayer por la tarde | Alejandro Sepúlveda

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Unos arqueólogos que trabajaban en el islote de na Galera, frente a Cala Estancia (Palma), descubrieron unos restos humanos enterrados a poca profundidad. Dos forenses examinaron los huesos y no se pusieron de acuerdo sobre su antigüedad. Ayer tarde la Guardia Civil se hizo cargo del caso y examinó el islote.
Según los datos facilitados, los arqueólogos dieron con el cuerpo cuando trabajaban en un estudio sobre un asentamiento púnico en na Galera, ubicado frente a unos 150 metros del Puro Beach. En mitad del islote, en un tramo de tierra, se encontró una cabeza y unos huesos enterrados a unos 20 centímetros de profundidad.
Dudas
Los especialistas dudaron que fueran restos arqueológicos y dieron aviso al juzgado. Un primer forense opinó que podían ser relativamente recientes, de unos 20 años, pero después una nueva inspección cambió radicalmente esta estimación.
Durante muchas horas, los investigadores buscaron indicios en el islote y no encontraron ni restos de ropa y efectos personales que permitieran identificar el cuerpo. El cráneo presentaba una serie de fracturas, que ahora serán estudiadas en el instituto anatómico forense.