La policía ha detenido a dos personas gracias a las denuncias. g Foto: A. SEPÚLVEDA | Alejandro Sepúlveda

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La campaña puesta en marcha por el Cuerpo Nacional de Policía para fomentar que los ciudadanos denuncien posibles hechos delictivos de forma anónima a través de Twiter o de correo electrónico da resultados. Este fin de semana el Grupo de Estupefacientes registró dos bares en Palma en los que se había constatado que se vendía droga gracias a denuncias anónimas. Éstas comunicaciones de vecinos sirvieron como base a los policías para solicitar al juzgado una orden de entrada y registro a dos bares de Cala Major y de Son Cladera.

En el primero de los locales, los agentes detuvieron al dueño del establecimiento, Juan P.S., de 69 años de edad. Los policías entraron en el establecimiento a las doce de la noche del pasado sábado. Dentro del local encontraron una pequeña cantidad de cocaína, además de una báscula y de otra parafernalia para vender la droga al pormenor y dinero en metálico. Además, varios clientes de los que estaban en el local fueron sancionados por llevar distintas cantidades de cocaína y de hachís encima. Los agentes de estupefacientes avisaron a la Patrulla Verde de la Policía Local de Palma ya que, al ser detenido el dueño por vender droga en el local daba pie a cerrar de forma fulminante el bar. Así, el establecimiento quedó precintado.

En Son Cladera los policías entraron también en un bar en el que se vendía droga, en este caso marihuana. A diferencia del primer local, en éste el dueño no ha sido arrestado y permanece al margen. Sí fue detenido uno de los parroquianos, Ramón S. B., de 33 años de edad, que llevaba encima 52,3 gramos de hachís y una pequeña cantidad de cocaína.