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Un juzgado de Palma ha condenado a dos años de cárcel por un delito contra el mercado a un comercial que robó el listado de clientes de una inmobiliaria de Son Vida y además hizo desaparecer cualquier copia de la empresa que saboteaba.
Los hechos ocurrieron el cinco de junio de 2009. El acusado trabajaba desde hacía más de un año en la inmobiliaria y tenía firmada una claúsula de confidencialidad. Decidió marcharse de la compañía después de que la propietaria se negara a hacerle socio. De esta manera, a las seis de la mañana fue a la sede de la inmobiliaria y, a través de su correo electrónico se hizo con el listado de clientes. Además borró todo rastro de ese documento en los servidores de la empresa que dejaba. Meses después montó una inmobiliaria y comenzó a llamar a los clientes de su antigua empresa para ofrecerles sus servicios.
En el juicio, el acusado negó los hechos y aseguró que se limitó a borrar correos privados que había enviado. Además dijo que fueron los clientes quienes le llamaron a él, algo desmentido por los propios aludidos en el juicio.
La empresa que mantiene el servidor de correo que utilizaba la inmobiliaria consiguió recuperar las fechas y horas en las que había saqueado a su antigua empresa. La condena aún no es firme y la sentencia abre la vía a que la víctima sea indemnizada.