La lancha de Cruz Roja llega al puerto de Eivissa con los marineros rescatados del naufragio.

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El barco pesquero ‘Valle de Elda’, con matrícula de la localidad alicantina de Santa Pola, quedó ayer completamente destruido a 27 millas al suroeste de Formentera tras originarse un fuego en la sala de máquinas cuando regresaba a puerto de pescar gamba, camarón y quisquilla.

La rápida intervención de los miembros de Salvamento Marítimo, que desplazó hasta el lugar su embarcación Salvamar Markab y el helicóptero Helimer 207, y la ayuda por parte de otras embarcaciones que se encontraban en el lugar impidió que se produjera una verdadera tragedia.

En el momento del suceso, a bordo del ‘Valle de Elda’ se encontraban doce tripulantes, seis senegaleses, un indonesio y cinco alicantinos, que se llevaron el susto de sus vidas. A pesar de la gravedad de los hechos sólo dos tuvieron que ser atendidos de heridas de consideración.

Sin embargo, la sensación de la mayoría a su llegada al puerto de Eivissa tras ser remolcados por el velero Endevour era de que habían vuelto a vivir. «A partir de ahora celebraré un nuevo cumpleaños y lo que tengo muy claro es que no voy a volver a embarcar nunca más», explicaba aún con el susto en el cuerpo Pedro Esteve, cocinero de la embarcación.

El fuego se originó por causas desconocidas en la sala de máquinas de la embarcación y se propagó tan rápidamente que no pudieron hacer nada por sofocarlo. «Las llamas se ha originado en la sala de máquinas y si no llega a ser porque era de día y estábamos todos despiertos, posiblemente no lo hubiéramos podido contar», continuaba Esteve.

Afortunadamente, el incendio se produjo a la hora de comer, en torno a las 13,00 horas, y a los doce tripulantes de la embarcación les dio tiempo a lanzarse a la balsa salvavidas. Sin embargo, uno de ellos, de 50 años y nacionalidad española, debido a las malas condiciones de la mar, se cayó de ella y por algunos momentos se le perdió de vista. «Hemos estado a punto de sufrir un drama porque durante bastante tiempo no sabíamos donde estaba nuestro compañero ni como se encontraba pero ya sabemos que está bien y estamos todos un poco más tranquilos», aseguraba Esteve.

El marinero desaparecido fue hallado por el helicóptero Helimer 207 y trasladado hasta el hospital de Can Misses donde, según las primeras informaciones, fue dado de alta tras sufrir quemaduras, un fuerte golpe en el labio y síntomas de hipotermia. También tuvo que ser atendido por heridas, en este caso en el puerto por los facultativos de Cruz Roja, el patrón del barco, Francisco Pérez, que sufrió quemaduras en sus piernas producidas cuando salía del puente de mando de la embarcación.» Todo ha sido en dos minutos, ha ardido igual de rápido que un cigarro, y al ser de fibra la embarcación ya no hemos conseguido parar el fuego», aseguraba Pérez mientras era atendido en tierra por los miembros de Cruz Roja.

El ‘Valle de Elda’, regresaba a Santa Pola, donde está matriculado, tras haber pasado dos meses faenando en alta mar. Sólo le quedaban siete horas para llegar a puerto y ver a sus familias. «Estábamos todos con muchas ganas de llegar a casa porque la intención era poder estar en Santa Pola para disfrutar con nuestra gente de las fiestas del pueblo, que se celebran del 1 al 7 de septiembre», explicaba Pedro Esteve.

Ahora todos ellos deberán esperar al menos 24 horas más para poder abrazar a los suyos. De momento la noche de ayer la pasaron en Eivissa donde se les ha buscado una habitación donde recuperarse del susto y pensar que, como dicen la mayoría de estos curtidos marineros, han vuelto a vivir.

En este enlace se encuentra el vídeo elaborado por Salvamento Marítimo del rescate: http://www.youtube.com/watch?v=970mgXmoqQg