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La Audiencia de Palma ha aplazado a septiembre de 2015 el juicio a un hombre acusado de abusar sexualmente de sus hijas, haciéndoles tocamientos con ánimo libidinoso desde que las niñas tenían 2 y 4 años de edad, para quien la Fiscalía pide una condena de 20 años de prisión.

El juicio estaba previsto para esta mañana pero ha sido pospuesto hasta el 7 de septiembre del año próximo después de que el acusado haya informado al tribunal de la sección primera de la Audiencia de que ha perdido la confianza en su abogado defensor, ya que éste haya intentado alcanzar un acuerdo de conformidad para rebajar la solicitud de pena a 2 años de cárcel. El acusado solicitará además las declaraciones de nuevos testigos.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, el hombre se prevalió de la circunstancia de que desde 2003, cuando él tenía 35 años, era el único progenitor custodio de las dos niñas para realizarles continuos tocamientos.

Desde marzo de 2007, el acusado tiene prohibido acercarse a las menores, cuya custodia asumió el Consell de Mallorca.

El ministerio público considera al hombre responsable de dos delitos continuados de abuso sexual y pide para él una condena de 10 años de cárcel por cada uno. Reclama además que se le prohíba aproximarse o comunicarse con sus hijas durante 15 años, así como que las indemnice con 30.000 euros a cada una de ellas por el daño moral causado.