El siniestro se produjo minutos antes de las siete de la mañana, cuando un todoterreno conducido por un joven de 20 años de Mancor de la Vall, y en el que viajaba como ocupante otro muchacho de 19, vecino de Inca, perdió el control.
El vehículo salía de la rotonda de la carretera de Inca a Lloseta y chocó directamente contra un poste de hormigón, cuya base quedó destrozada. Los daños fueron tan importantes que la pieza, de unos diez metros de altura, quedó colgando y con peligro de desplomarse sobre la acera.
La Policía Local de Lloseta se hizo cargo del atestado, ya que el accidente había ocurrido en casco urbano, y después pidieron apoyo a la Guardia Civil de Tráfico para realizar la prueba de alcoholemia al conductor. Una grúa retiró el todoterreno siniestrado. El poste eléctrico quedó inutilizado y dejó sin luz a una veintena de vecinos de Lloseta. Cinco horas después del accidente, se pudo restablecer el suministro eléctrico a las familias afectadas.
6 comentarios
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No es lógico que haya tanto poste y tanto cable colgando por todas partes. Con los cientos de veces que han levantado y cerrado zanjas para no se sabe qué (supongo que porque había demasiado dinero y había que gastarlo) ya podrían haber enterrado todas las líneas eléctricas.
Seguro que circulaba a 30 por hora. Y en segunda.
Seguramente pasó por ir a la velocidad adecuada. como dice el Sr Llompart, demasiado coche para un pisa pedales.
massa cotxo, massa jove, massa alcohol
Razones paisajísticas y medioambientales invitan a plantarse la necesidad imperiosa de enterrar la red eléctrica de les Illes Balears
Suerte que este elemento no atropellara a alguien que pasara por allí paseando el perro.