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Noche larga en Pere Garau. Más de una veintena de policías nacionales rodeó este viernes un edificio de aquella barriada palmesana donde supuestamente se escondía un ladrón armado que acababa de encañonar a un vecino que le sorprendió robando.

Los hechos ocurrieron sobre las 23.05 horas, cuando la centralita telefónica del 091 recibió la llamada de un vecino alertando de lo ocurrido. Más de veinte agentes, fuertemente armados con chalecos antibalas, pistolas y escopetas, montaron un perímetro de seguridad entorno a la finca de la calle Ferrer de Pallarés y comenzaron la búsqueda del delincuente.

Finalmente, no se encontró al sospechoso, lo que extrañó sobre manera a los agentes. De hecho, según el relato del denunciante, tras ser encañonado bajó al portal y ya no se movió, por lo que el ladrón no pudo salir por esa entrada.

La Policía Nacional continuaba este sábado la investigación para esclarecer por completo lo ocurrido. De momento no hay detenidos.