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El juez que investiga la causa de corrupción en la Policía Local de Palma ha abierto dos piezas separadas en la causa para facilitar que dos asuntos lleguen antes a juicio. Una de ellas es el supuesto trato de favor al exconcejal del PP Carlos Veramendi, denunciado por los dueños de varios locales de ocio, y la otra, las supuestas vejaciones homófobas que sufrió una policía local por parte de sus compañeros. Estos dos hechos se desgajan de la causa principal que investiga un grupo criminal en el seno del cuerpo.

Este miércoles volvió a declarar como testigo la agente que ha denunciado ese trato vejatorio. En su declaración insistió en que ha sido amenazada y que tiene miedo. La situación de acoso, según señaló, ha continuado más allá de las últimas detenciones. También desveló nuevos datos, como una actuación en Son Gotleu en la que ella descubrió en un cacheo droga a una mujer en su sujetador y que a ese acta nunca se le dio trámite o, al menos, a ella no le consta que se hiciera. En su testimonio apuntó de nuevo al excomisario Rafael Estarellas y al sindicalista del cuerpo Jaime Garau.

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También mencionó que uno de los dos agentes que se encuentran en prisión preventiva acusados de haberla amenazado solía entrar en clubes de alterne para orinar. Además de esta testigo comparecieron otros dos agentes que tienen una relación de amistad con ella. Ambos señalaron que su compañera les comentó alguno de los episodios homófobos pero negaron haberlos presenciado ellos directamente.

La apertura de estas dos piezas separadas supone la primera ocasión en la que el magistrado Manuel Penalva toma una decisión en este sentido. Hasta ahora se ha mantenido la unidad del grueso de las actuaciones sobre Palma y Calvià al entender que están vinculadas por la existencia de una misma trama empresarial y policial. Estos dos episodios quedan así separados y podrán ser tramitados con una mayor rapidez. Sobre Veramendi se investiga si influyó en mandos de la Policía Local para que realizaran actuaciones en tres locales situados junto a su casa y si pudo cometer un delito de tráfico de influencias.