La Policía Nacional ha detenido a cuatro trabajadores de la empresa concesionaria del cementerio municipal de Oviedo por sustraer durante años joyas y piezas dentales de oro de los cadáveres durante su proceso de exhumación antes de ser trasladados al osario general.
Las primeras estimaciones apuntan que los cuatro detenidos, a los que se les imputan los delitos de apropiación indebida continuada y profanación de cadáveres, podrían haber obtenido un beneficio de 11.000 euros por la venta de los objetos sustraídos, ha informado la Jefatura Superior de Policía de Asturias.
Los investigadores creen que los arrestados, trabajadores de la concesionaria del cementerio El Salvador de la capital asturiana, llevaban realizando esta práctica desde hace años.
Los robos eran cometidos cuando se producía la exhumación de los cadáveres para su envío al osario general.
En el 90 por ciento de los casos, según la gerente de la funeraria que lleva la gestión del cementerio, los familiares acuden a la exhumación de los cuerpos y se les hace entrega, mediante un recibo, de los efectos personales con los que fueron en su día enterrados.
En el resto de los casos son los propios oficiales de cementerio los que han de depositar los efectos personales en la funeraria para su entrega a los familiares.
Según los investigadores, los detenidos aprovechaban las situaciones en las que no acudían los familiares para hacerse con medallas, alianzas, pulseras y otras joyas, pero especialmente de fundas dentales, casquillos de dentaduras y piezas dentales de oro, que después vendía en establecimientos de compraventa de este metal.
Los cuatro oficiales de la funeraria han sido puestos en libertad con cargos tras prestar declaración y las diligencias han pasado al Juzgado de Instrucción de Oviedo en funciones de guardia.
La investigación ha sido realizada por el Grupo de Delincuencia Especializada y Violenta de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Asturias.
12 comentarios
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Pues no eran ni asturianos ni españoles... eran rumanos y ucranianos. Pero eso es lo de menos, lo importante es que nunca se deben enterrar los difuntos con joyas.
Siempre hay un hueco mas para que el ser humano caiga mas bajo.
Y para ke kiere un difunto joyas?es de sentido comun las disfrute un vivo
Esta practica es muy común en los cementerios, lo sé bien oro y prótesis de platino y titanio.
Los políticos sí que saben robar a los muertos a lo grande mediante el injusto impuesto de sucesiones. Y encima votamos a esos macro ladrones.
Ya hay que ser mala persona y caer bajo para robar a una persona fallecida.
Aparte que se demuestra la catadura (caradura) moral de estos sujetos, hay que analizar en profundidad la noticia tal como la leemos. "Durante años se dedicaron a esta "actividad" y lo conseguido asciende a......¡once mil euros!". ¿Vale la pena?. De ninguna manera. Ahora lo que procede es despedirlos y al paro, si es que lo cobran. ¿algún día saldrá una persona que no sea ladrona?.
Desde luego, a quien se le ocurre enterrar a un muerto con joyas, si ya no las va a disfrutar?
En este país te roban en vida, y te roban también una vez muerto...
El mallorquín al que le cuentan las historias según convenga.