El investigado fue detenido el año pasado y quedó en libertad. | Alejandro Sepúlveda

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El supuesto ‘número tres' del caso Cursach' admite que dio un billete de 500 euros a una funcionaria de Cort, pero sólo para ayudarla para que comprara los libros de texto de sus hijos. El investigado fue citado este lunes para declarar dentro de la pieza que investiga los pagos de dinero en efectivo y la entrega de regalos de lujo a funcionarios públicos por parte del Grupo Cursach. Al frente de la declaración estuvo el juez Miquel Florit, que sustituye al instructor de la causa, Manuel Penalva, mientras se resuelve el incidente de recusación planteado por las defensas. Al tratarse de una causa con preso se llevan a cabo diligencias porque se entienden que son urgentes. El investigado había sido citado en noviembre pero pidió no declarar por motivos de salud.

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Antonio Bergas negó que fuera el encargado por parte del grupo de entregar los regalos a los funcionarios y que se llevara a cabo esa práctica de forma habitual. El expolicía local es, según los investigadores, la persona que hacía de enlace entre el grupo y los empleados públicos y que los agasajaba con entregas de dinero en efectivo, botellas de champagne o cestas de navidad. Una funcionaria de Cort reconoció haber recibido un billete de 500 euros de manos del investigado. Éste admitió la entrega, pero la situó en un plano personal. Según manifestó tenía una relación de confianza con esta funcionaria y, ésta le pidió ayuda para poder pagar los libros de texto de sus hijos, a lo que él accedió.

El juzgado mantiene abierta una pieza separada de la causa principal para investigar estas prácticas que afectarían no sólo a funcionarios municipales de Palma y Calvià sino también a trabajadores del Govern.