Dispositivo conjunto de la Policía Local y la Guardia Civil en Andratx. | Michel's

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Agentes de la Policía Local y Guardia Civil de Andratx procedieron a la detención de un hombre de unos 40 años acusado de agredir sexualmente a una mujer discapacitada en un párking público del Port d’Andratx.

En torno a la una y cuarto de la madrugada del pasado sábado, la central del 112 alertó a los equipos de emergencia de la presencia de una joven que precisaba ayuda en el aparcamiento público de sa Taulera. A su llegada, los agentes encontraron a una chica con un importante porcentaje de discapacidad diagnosticada, en mal estado y bajo los efectos del alcohol.

La víctima afirmaba que había sido objeto de una violación. Tras realizar numerosas indagaciones, al día siguiente la Guardia Civil procedió al arresto del presunto agresor.

Se trata del segundo arrestado en menos de quince días acusado de violación en el municipio. Además, se da la circunstancia, de que a ambos detenidos les une un parentesco familiar directo.

Otra agresión

El pasado 15 de mayo, un hombre de 40 años ya fue detenido en la medianoche por un presunto delito de agresión sexual después de que agentes de la Policía Local de Andratx lo sorprendieran con los pantalones bajados mientras trataba de forzar a una mujer dentro de un coche.

Los hechos sucedieron a las 23 horas cuando una vecina de la calle Metge Gaspar Pujol de Andratx llamó a la policía para alertar de los gritos de auxilio que había escuchado procedentes de un coche aparcado. Eran los gritos de una mujer que al parecer intentaba impedir que la violaran.

Los agentes se desplazaron al lugar y lo hicieron sin hacer uso de las sirenas para acercarse con el máximo sigilo al lugar de los hechos. En ese momento, sorprendieron a un hombre que se encontraba dentro de un coche con los pantalones bajados tratando de forzar a una mujer.

La intervención policial fue inmediata e impidió que la agresión sexual fuera a más. Los agentes obligaron al hombre a desistir y a bajar del vehículo. El varón insistió que la relación que se disponía a mantener era consentida.

Sin embargo, la mujer, de nacionalidad alemana y unos 50 años de edad, aseguró en repetidas ocasiones que en ningún caso se trataba de una relación consentida.