TW
0

Los Mossos d'Esquadra han detenido en Barcelona a los cinco miembros de una organización de traficantes de marihuana que extorsionaron durante tres años a un administrador financiero, al que responsabilizaban del dinero que les había estafado un socio de la víctima.

Según han informado este martes los Mossos, el hombre extorsionado fue obligado a firmar documentos en los que aceptaba una deuda de 585.000 euros en concepto de perjuicios económicos causados, tras ser amenazado de muerte en repetidas ocasiones tanto él como su familia, y haber sufrido una agresión física.

La operación policial ha permitido la detención de cuatro hombres y una mujer de nacionalidad española, de edades comprendidas entre los 28 y los 54 años, como presuntos autores de los delitos de extorsión, tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal.
Otros tres hombres han quedado en situación de investigados por los mismos hechos.
La investigación se inició el pasado 13 de agosto cuando la policía autonómica recibió la denuncia de un economista y administrador financiero, que afirmaba ser víctima de una extorsión desde hacía más de tres años por parte de un grupo de personas, a los que había entregado ya 80.000 euros por el pago de una deuda que él no había contraído.

El grupo delictivo extorsionó además a otros socios e inversores relacionados con la víctima, y uno de ellos les entregó tres relojes valorados en 100.000 euros antes de abandonar el país para huir de los delincuentes.

A una tercera víctima le exigieron 60.000 euros en relación con una operación fallida de compraventa de un inmueble, y tras visitarle asiduamente para amenazarle, llegó a pagar unos 12.000 euros y un vehículo.

El líder de la banda, una persona corpulenta con conocimientos de boxeo y con gran capacidad intimidatoria, amenazó de muerte al administrador y a su familia en repetidas ocasiones, e incluso le agredió físicamente.

Se comprobó que el grupo extorsionador se dedicaba al tráfico de marihuana y que disponía de dos plantaciones, mientras en los registros domiciliarios se intervino un arma de fuego corta semiautomática de 9 mm con la numeración borrada, una defensa eléctrica, un puño americano, más de 20.000 euros en metálico y los tres relojes presuntamente entregados por una de las víctimas.

Los arrestados pasaron a disposición judicial el pasado 23 de noviembre y el juez decretó para todos libertad con cargos y órdenes de alejamiento de la víctima.