El autor confeso de la muerte de la joven zamorana Laura Luelmo, acompañado por la Guardia Civil tras su detención. | Efe
Madrid27/12/18 9:29
El asesino de Laura Luelmo, Bernardo Montoya, mintió en su declaración ante la Guardia Civil tras ser detenido, según los resultados de la investigación dados a conocer este miércoles. No obstante, sí confesó a los agentes el crimen de la joven profesora de Zamora: «Por favor, no me dejéis salir de la cárcel porque lo volveré a hacer», según ha revelado este jueves el programa Espejo Público.
28 comentarios
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Se sabe enfermo y que nada puede hacer para evitarlo. Uff es fuerte
Se gasta menos dinero en mantener a un jubilado, en las residencias públicas, que en mantener a un preso, y eso, que además, a un jubilado se le retiene el 70% de su pensión de jubilación, mientras a los presos no se les exige nada. Algunos políticos se lo tendrían que hacer mirar.
Qué vergüenza! Que hasta el mismo culpable lo pida....lo de cambiar las leyes ya clama al cielo.
Encima, como si de una joya de gran valor se tratase, lo tienen separado del resto de reclusos por temor a represalias.
Evidentemente está es la realidad, lo volvería a hacer..o sea, no tiene solución como otros muchos casos. NO PUEDEN FORMAR PARTE DE LA SOCIEDAD. Como ya dije, es necesario construir una cárcel apartada, tipo Alcatraz, con mazmorras y a pan y agua, como antes.
Cómo no cambie el código penal en éste país, estamos perdidos, porque a éste descerebrado lo van a soltar el día de mañana, así como a otros.
Cuando salga de prision que se vaya a vivir al lado de la casa de Pedro Sanchez ,haber que pasa.
No me creo que haya hecho estas declaraciones. Para mí que los medios estáis intentando manipular a la sociedad.
Al menos reconoce que lo volverá a hacer, a lo mejor gracias a este caso, se revisa la condena permanente.
Siento decir esto, pero visto el devenir de la sociedad, y partiendo de la premisa de que nadie esta autorizado a quitar la vida de una persona, es necesario la vuelta a la pena de muerte de los confesos, cuando no haya ni una sola duda razonable.