El detenido acumulaba seis detenciones en un año y hacía poco que había salido de la cárcel en la que ingresó por atropellar al guarda de seguridad de un establecimiento de hostelería del Paseo Marítimo para escapar tras cometer un hurto en el mismo.
El detenido, de profesión comercial, estaba siendo investigado por falsear un contrato con un cliente para percibir indebidamente una comisión.
La Policía Nacional ha explicado que precipitó su detención el ser visto en las inmediaciones de su domicilio por uno de sus vecinos en posesión de unos palos de golf que éste reconoció de inmediato como los que le habían sido robados de su trastero el pasado verano.
El detenido al percatarse de que había sido descubierto, comenzó a deshacerse apresuradamente de pruebas que aún conservaba en su domicilio, en la que abandonó raquetas de tenis sustraídas a uno de sus vecinos en un aparcamiento y varias cajas con prendas de ropa en un contenedor de basura.
La Policía Nacional consiguió recuperar dichos objetos, que fueron reconocidos por las víctimas, así como a la detención de esta persona
Los robos, un total de cuatro, habían tenido lugar entre mayo y noviembre del año pasado.
El detenido aprovechaba que los trasteros de la urbanización eran accesibles desde un mismo pasillo subterráneo para forzar las puertas de algunos de estos en los que los propietarios guardaban objetos, desde ropa o equipos de equitación hasta raquetas caras y bicicletas de buena calidad. El detenido ha pasado a disposición judicial este jueves.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Nada, que detenerlo no sirve de nada. Mientras esté suelto, va a estar siempre robando. Que lo expulsen de la isla, si no lo quieren meter en la cárcel.