El juzgado de instrucción número 2 de Ribeira (A Coruña) ha acordado la apertura de juicio oral contra José Enrique Abuín Gey, alias el Chicle, por el intento de rapto de una mujer en Boiro el 25 de diciembre de 2017, tentativa que permitió detenerlo por el crimen de Diana Quer.
El sospechoso por la muerte violenta de esta joven de Madrid, cuya vista se encuentra pendiente de fecha, está acusado en esta otra causa de un delito de detención ilegal o, alternativamente, un delito consumado de coacciones, así como un intento de agresión sexual, robo con violencia e intimidación en grado de tentativa, aparte de un delito de amenazas y otro de lesiones.
La Fiscalía, informa el Tribunal Superior de Justicia de Galicia, solicita que sea condenado a 15 años y diez meses de cárcel y al abono de una indemnización de 15.750 euros, o alternativamente, doce años y diez meses.
La jueza, además, ha ratificado la prisión provisional y ha requerido al procesado para que presente una fianza de 20.000 euros para asegurar las responsabilidades pecuniarias que se le pudieran imponer.
La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Ribeira declara en el auto que el órgano competente para el conocimiento y enjuiciamiento de la causa es la sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago.
En su escrito de acusación, el fiscal de Santiago concluye que el Chicle espero a la víctima en un lugar con iluminación escasa y sin viandantes «dejando encendido el motor y abierta la puerta del conductor con la clarísima intención de abordar a T. , privarla de libertad de comunicación y movimientos, conseguir introducirla en el coche para, posteriormente, atacarla sexualmente».
La joven «iba caminando tranquilamente al tiempo que sosteniendo conversaciones vía whatsapp» cuando «de forma sorpresiva e inesperada» el acusado «la rodeó con sus brazos, a la altura del cuello, dejándola inmovilizada y poniendo, para conseguir su propósito, un objeto metálico en la nuca, y hasta en tres ocasiones le dijo 'dame el móvil, dame el móvil ahora mismo, dame el móvil'».
Ella le ofreció dinero a cambio las tres veces y en ese momento el ruido de un vehículo alertó al acusado, que la soltó y le dijo que todo era una broma.
Sin embargo, a la joven no le dio tiempo de escapar porque «el acusado volvió a cogerla con fuerza hasta introducirla a empujones y golpes en el maletero», donde consiguió meterla hasta quedar en posición de sentada pero con las piernas fuera.
La víctima se resistió «fuertemente» mientras gritaba y la escucharon dos jóvenes que fueron en su auxilio. Al llegar estos, el acusado desistió de su acción y «huyó apresuradamente sin conseguir su propósito sexual tal como lo había planeado».
José Enrique está interno en la actualidad en régimen de prisión preventiva en la cárcel de Mansilla de las Mulas, en León, y antes estuvo en Teixeiro y A Lama, ambas en Galicia.
Se enfrenta, entre otras penas solicitadas por el fiscal, a una petición de prisión permanente revisable por el asesinato de la joven Diana Quer.
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