José Enrique Abuín, conocido como 'El Chicle', durante el juicio. | Europa Press - Álvaro Ballesteros

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Había salido de su casa con la intención de robar gasóleo cuando se topó de forma casual con su víctima. La explicación que José Enrique Abuín Gey, alias 'El Chicle', dio a través de su defensa sobre su encuentro con Diana Quer ha sido la misma que ha esgrimido este jueves ante el juez en relación con el supuesto intento de rapto de una joven en Boiro.

En la vista ha sido clave una grabación de audio de la agresión remitida por la víctima a un amigo, en la que 'El Chicle' no ha reconocido su voz pero que fue clave en su momento para vincular los dos casos y llevar a su detención y posterior localización del cadáver de Diana Quer.

Rodeado de una gran expectación, 'El Chicle' se ha sentado este miércoles en el banquillo de los acusados para responder por el intento de rapto de una joven ocurrido el día de Navidad de 2017 y que, con posterioridad, llevó a la resolución del caso Diana Quer. De hecho, a la vista ha acudido el padre de la joven madrileña, Juan Carlos Quer, que ha acompañado a la madre de la víctima a la entrada y a la salida y, durante la vista, ha mantenido la vista fija en el único acusado del asesinato de su hija. La primera sesión de este juicio comenzaba en Fontiñas con más de media hora de retraso con la declaración del único acusado, Enrique Abuín, que ha comparecido tranquilo ante el tribunal y ha contestado a todas las preguntas.

Así, El Chicle ha dicho que se encontraba ese día en la localidad porque había ido hasta allí para robar gasóleo, algo que, ha explicado, no logró. Por ello, cuando regresaba a su vehículo, se topó con la joven denunciante «de frente» y, «como necesitaba dinero», le pidió «el móvil». «Solo fue eso, nada más. Forcejeamos y no me quiso dar el móvil, pero no recuerdo nada más», ha dicho ante el tribunal, sosteniendo que todo fue únicamente un robo.

De hecho, ha negado a las preguntas de la Fiscalía, que ejerce la acusación, que estuviese siguiendo a la joven, que la empujase o que tratase de meterla a la fuerza en el maletero, negando que los hechos se desarrollasen en las inmediaciones de su vehículo. «Yo la dejé ir», ha apostillado.

Víctima y testigos

Sin embargo, tanto la víctima como los dos jóvenes que acudieron en su ayuda al oír los gritos han situado a Abuín Gey y el forcejeo junto al vehículo del acusado, que tenía, además, el maletero abierto.

Así, la joven, que ha declarado tras un biombo para preservar su identidad, ha contado que, tras interceptarla en una calle de Boiro, 'El Chicle' la amenazó con un cuchillo y la «empujó» para meterla a la fuerza en el maletero de su vehículo. «Me dije: intenta salir de aquí, porque como cierre el maletero, no sales más», ha contado ante el tribunal, visiblemente nerviosa.

La joven, que en varias ocasiones ha tenido que interrumpir su relato, ha dicho que caminaba por la calle absorta en una conversación de Whatsapp cuando se dio «de bruces» con él. El hombre, ha dicho, se encontraba apoyado sobre su coche con la puerta abierta, interrumpiéndole el paso.

'El Chicle', ha contado la joven, le pidió entonces que le entregase el móvil, pero ella se negó y le ofreció a cambio dinero, algo que él no aceptó. «El móvil era mi única forma de salvarme si en algún momento cerraba la puerta, para llamar a la Policía», ha dicho, haciendo referencia a que siempre consideró que la agresión era algo más que un robo.

La joven ha contado también que Abuín Gey la amenazó con un cuchillo u objeto metálico similar y le dijo «No chilles o te corto», por lo que, ha admitido, temió por su vida. Aunque en un momento del forcejeo Enrique Abuín dijo que todo era una «broma», pasados unos minutos, y mientras ella se alejaba, se «abalanzó» sobre la joven y llegó a introducirla en el maletero a excepción de las piernas, que chocaron contra la defensa del coche. En el maletero, ha contado la joven, no vio ninguna garrafa destinada supuestamente a robar gasóleo, aunque sí que en el fondo había colocado «algo blanco, una sábana o una toalla».

El forcejeo fue escuchado por dos jóvenes que se encontraban en la zona, y que este miércoles también han declarado que, tras oír «gritos», se encontraron a ambos en las inmediaciones de un vehículo gris --el del acusado--, que tenía el maletero abierto. Los dos han explicado que semejaba una agresión y que la joven les manifestó que habían intentado secuestrarla.

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Un audio

Un punto clave en este juicio ha sido la reproducción reiterada de un audio grabado por la propia joven y remitido a través del programa Whatsapp a un amigo durante la agresión.

En ella se escucha a la joven, visiblemente nerviosa y asustada, pidiendo numerosas veces al agresor que «por favor» no le haga daño y al hombre reclamándole que le entregue su móvil y entre en el vehículo. La joven se ofrece entonces a darle dinero, algo que rechaza su interlocutor, que la amenaza: «Si chillas, te corto».

Ante el juez, Abuín Gey ha asegurado que no reconoce su voz en esta grabación, aunque precisamente esta fue la prueba inicial que, junto con los números de la matrícula que había memorizado la víctima y su identificación física por parte de ésta, llevó a la detención del Chicle.

En la sesión ha comparecido un agente de la Policía Judicial al que fue remitido el audio de la agresión y que, al escucharlo, identificó como conocida la voz masculina que en él aparecía. Correspondía a Enrique Abuín, con quien se había entrevistado con anterioridad como sospechoso de la desaparición de la joven Diana Quer, ocurrida año y medio antes en un ayuntamiento cercano.

Los agentes mostraron a la víctima hasta seis fotografías, entre las que se encontraba la del Chicle, al cual identificó como el autor de la agresión. La detención de Enrique Abuín, ocurrida solo dos días después, el 27 de diciembre, llevó a la resolución de la desaparición de Diana Quer, dado que admitió ante los agentes haber sido el autor de su muerte y los llevó a una nave abandonada en Asados donde, dentro de un pozo, encontraron su cadáver.

Cámaras

También en esta primera jornada del juicio ha declarado el agente que analizó las cámaras de seguridad de una calle cercana a los hechos, donde se puede ver un vehículo que coincide con el del acusado dar la vuelta justo antes de cruzarse con la víctima --que aparece caminando y mirando al móvil--. El turismo desaparece de la imagen tras la joven.

Otros agentes han indicado que la víctima recordaba parcialmente la matrícula del coche del acusado y que 'El Chicle' les afeó en el momento de su detención el montar un «circo» por «el robo de un móvil».

Agresión sexual

Frente a la versión de 'El Chicle', que defiende que todo fue un robo, la Fiscalía sostiene que el ataque tuvo un móvil sexual. La versión también la apoya el padre de Diana Quer, que considera a Abuín un «depredador» sexual que utilizó con su hija el mismo 'modus operandi' que pretendía emplear con esta víctima.

Por ello, Juan Carlos Quer ha hecho referencia a la salida de los juzgados a los «tres casos» que todavía tiene pendientes Enrique Abuín, el del asesinato de su hija, el de la agresión de Boiro y el de la supuesta agresión sexual a su cuñada, todos «en la misma dirección». La madre de la víctima ha dicho al finalizar que el desenlace era llevarla «al mismo sitio donde estaba Diana».

En este caso concreto, Abuín Gey está acusado por el Ministerio Público de un delito de detención ilegal o, alternativamente, un delito consumado de coacciones, así como de un intento de agresión sexual, un robo con violencia e intimidación en grado de tentativa, un delito de amenazas y otro de lesiones. La Fiscalía solicita que sea condenado a 15 años y diez meses de cárcel.