El acusado será juzgado el próximo martes por el Tribunal Superior de Justicia de Baleares por dos delitos de homicidio en grado de tentativa para los que se le piden siete años de cárcel por cada uno, y otro delito de atentado a agentes de la Autoridad para el que se le pide una de pena de cuatro años de prisión.
Los hechos por que este súbdito libio permanece encarcelado, se produjeron el 3 de septiembre del año pasado a raíz de una corta discusión con un ciudadano alemán, quien recibió una potente puñalada en el torax que casi estuvo a punto de causarle la muerte.
El mismo día y tras asestar la puñalada a la primera víctima, el agresor acuchilló en el pecho a su amigo, también alemán y quien tuvo que ser intervenido quirúrgicamente de urgencia para detener la hemorragia causada por la herida.
Con la dos víctimas en el suelo, el agresor se enfrentó con el cuchillo en una mano a los agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local que acudieron al lugar, y que ante la actitud violenta del ahora acusado realizaron varios disparos al aire para obligarlo a entregarse.
Sin embargo, el agresor solo arrojó el cuchillo al suelo cuando fue alcanzado en un tobillo por el disparo efectuado por un policía.
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