Si bien las autoridades han indicado que la pelea comenzó por un conflicto doméstico, el presidente del país, Qasym-Jomart Toqayev, ha tenido que desmentir rumores de que la región se ha conviertido en un escenario de persecución a la minoría china de los dungan.
«Se creará un equipo interinstitucional para investigar el conflicto. y las autoridades tienen la tarea de llevar ante la justicia a aquellos que atribuyen la situación a conflictos étnicos y difunden rumores y desinformación», ha indicado en su cuenta de Twitter.
Según el ministro del Interior kazajo, Erlan Turgumbaev, «durante los disturbios, 40 participantes han recibido lesiones corporales y heridas de bala. Ocho personas murieron debido a las heridas sufridas», ha informado en un comunicado recogido por el portal Tengrin News.
En un primer momento más de 70 personas se enzarzaron en la pelea, ocurrida concretamente esta pasada noche en la localidad de Masanchi, provincia de Zhambyl, y que fue creciendo en intensidad hasta que más de 300 personas acabaron participando en el enfrentamiento.
Además, los implicados se resistieron a la Policía con piedras y armas de fuego cuando los agentes procedían a su detención. Dos de los efectivos de las fuerzas de seguridad han acabado con heridas de bala, en pronóstico reservado, informa la agencia oficial de noticias rusa, RIA Novosti. El total de detenidos es de 49.
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