Dos guardias civiles en la finca de Badajoz donde se produjo el tiroteo. | Guardia Civil

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Un hombre ha sido condenado a ocho años y cuatro meses de cárcel por disparar a un joven con una escopeta en la pierna y refugiarse en Porto Cristo, en 2017. El acusado indemnizará a la víctima con 69.869 euros por las lesiones y secuelas. El Tribunal Superior de Justicia de Extremadura ha confirmado la sentencia de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Badajoz.

La sentencia declara probado que los hechos tuvieron lugar sobre las 10.00 horas del 2 de septiembre. El joven había pagado 40 euros por un teléfono móvil y el acusado no se lo entregó. La víctima y su tío se personaron en la parcela del procesado, situada en la localidad de Acedera, junto a las compuertas de la Confederación Hidrográfica del Guadiana.

Pierna

Cuando el joven y su tío bajaron del coche, el agresor apuntó con una escopeta de caza al pecho del chico mientras les decía que abandonaran la finca. El hombre disparó a la pierna izquierda del perjudicado y se dirigió a su tío: «Vente, que tengo otro para ti». El hombre ayudó a su sobrino a introducirse en el vehículo y abandonaron inmediatamente el lugar. La Policía Judicial de la Guardia Civil de Villanueva de la Serena abrió una investigación no encontró la escopeta. Los jueces recogen que el autor del disparo no tenía permiso y/o licencia de armas.

La víctima sufrió una herida con fractura en el fémur izquierdo y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente el mismo día de los hechos en el hospital Don Benito-Villanueva. La lesión, según el fallo, tardó en curar 376 días y el joven todavía tiene perdigones en el muslo izquierdo y en la rodilla. Según el informe del médico forense, el 4 de octubre de 2018, la víctima caminaba ayudado de una muleta y con cojera. El día del juicio, el 16 de julio de 2019, los jueces no le apreciaron la cojera y tampoco llevaba la muleta.

El presunto autor de la agresión huyó y se refugió en una vivienda de Porto Cristo hasta que fue detenido por la Guardia Civil, el 18 de septiembre, más de dos semanas después del incidente. Un juzgado de Manacor ordenó su ingreso en prisión.

La Fiscalía reclamaba 15 años y 10 meses de cárcel para el acusado por un delito de lesiones agravadas y otro de amenazas.

El agresor se encontraba en tercer grado

El autor del disparo, en el momento de los hechos, se encontraba en tercer grado penitenciario y llevaba una pulsera telemática (de seguimiento). El hombre, pese a que tenía la obligación de permanecer en su domicilio de Orellana la Vieja desde las 23.00 a las 07.00 horas, viajó a Mallorca el 15 de septiembre y fue detenido el día 18 en Porto Cristo, según recoge la sentencia.