La polémica se ha generado a raíz de unas imágenes que se han difundido a través de las redes sociales sobre el momento de la detención, en las que se ve a cuatro agentes y a la mujer en el suelo retenida por dos de ellos, pidiendo auxilio, hasta que los agentes se la llevan esposada.
La policía catalana ha explicado a Europa Press que fue una intervención correcta y que se trasladó la información de esta detención a los juzgados correspondientes.
Los Mossos han detallado que la mujer fue identificada en la vía pública hablando con dos personas más, que fueron denunciadas por incumplir con las normas de confinamiento decretadas por el estado de alarma por el coronavirus.
En este sentido, han apuntado que solo se detuvo a la mujer, y no por romper el confinamiento, si no por un «comportamiento hostil», y han precisado que mordió el dedo de uno de los agentes de Mossos.
La misma policía ha insistido en que las otras dos personas no fueron detenidas porque no mostraron ninguna oposición, pero que a la detenida se le imputa un presunto delito de atentado, lesiones y daños a la autoridad, y han precisado que en ningún momento presentó un documento conforme estaba en la vía pública por un motivo justificado.
Fuentes cercanas al caso consultadas por Europa Press han indicado que la versión de la mujer es «absolutamente contradictoria», que mostró una actitud muy agresiva y que los agentes en ningún momento la insultaron ni agredieron.
En este sentido, destacan que es una mujer que ha sido detenida en otras ocasiones por atentado a la autoridad en Badalona, y han asegurado que si ella tuvo lesiones durante la detención fue porque se las hizo ella misma dándose golpes contra un coche.
Hasta el momento, aunque ya ha pasado más de un mes desde lo sucedido, fuentes policiales han explicado que la denuncia no ha sido admitida a trámite.
GUANYEM PIDE INVESTIGARLO
El grupo municipal Guanyem Badalona ha exigido a raíz de lo sucedido que las instituciones públicas realicen una denuncia y que los Mossos lleven a cabo una investigación, y han relatado que la detención de la mujer fue cuando esta volvía a casa.
«La menospreciaron y la redujeron violentamente sin justificación, y en el momento de su detención le propinaron un puñetazo en la cara», apunta el grupo liderado por la exalcaldesa del municipio Dolors Sabater.
Guanyem también añade que tienen motivos para pensar que se trata de una agresión «sexista y racista», porque la joven, de origen dominicano, ha asegurado que los agentes le preguntaron si era doctora o una prostituta, en sus palabras.
2 comentarios
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Llevo tiempo tratando de ver la diferencia entre la policía española y el KKK, todavía sigo intentándolo.
Una limpiadora que debe cobrar 900 € y le meten una sanción de 600 porque está hablando en la calle... y luego a insultos y golpes. Que asco dan.